La mejor forma de prevenir la proliferación de mosquitos, es eliminar todos los criaderos. Muchos de los recipientes donde se crían estos insectos no son de utilidad (latas, botellas, neumáticos, trozos de plástico y lona, bidones cortados). Por eso, debés eliminarlos y evitar que se acumulen en tu casa.
En caso de no poder eliminarlos, da vuelta los objetos que se encuentran en el exterior y baldes, palanganas, tambores y cambiá el agua de bebederos de animales, colectores de desagües de aire acondicionado o lluvia, dentro y fuera de la casa, cada 3 días. Recordá frotar las paredes de los recipientes con una esponja a fin de desprender los huevos de mosquito que puedan estar adheridos.
Recordá rellenar los floreros y portamacetas con arena húmeda y mantené los patios limpios y ordenados y los jardines desmalezados.
También es importante prevenir la picadura del mosquito usando siempre repelentes siguiendo cuidadosamente las recomendaciones del envase; utilizando ropa clara que cubra los brazos y las piernas, especialmente durante las actividades al aire libre; colocando mosquiteros en puertas y ventanas, y cuando sea posible usar ventiladores o aire acondicionado en las habitaciones, protegiendo cunas y cochecitos de bebés con telas mosquiteras y utilizando repelentes ambientales como tabletas y espirales.