Su ingreso al municipio fue un 1 de febrero de 1975 con el inicio del gobierno local, encabezado por Jorge Yáryez padre.
Las tareas por aquellos tiempos eran diferentes, ya que el municipio estaba en pleno inicio y organización. Eran tiempos difíciles, no había elementos suficientes, pero igual se concretaron obras hasta la llegada el gobierno militar, cuenta Cerutti.
Desde sus inicios fue ascendiendo de ordenanza hasta llegar al máximo de su carrera municipal como encargado del Área contable con el gobierno de Gaspar Carlino hasta su retiro.
En su relato, afirma que siempre trabajó con agrado en los diferentes cargos que tuvo y que es el único empleado que vio y trabajó con todos los intendentes que pasaron por la entidad gubernamental.
Afirma que siempre tuvo una relación muy buena con los presidentes municipales y que en relación a los gastos, todos fueron muy ordenados lo que permitió una mejor organización contable.
En los primeros tiempos, “no había nada”, relata. La gente demandaba arreglo de las calles, la recolección de residuos que se hacía en carro, el regado de las calles. Fue en la primera junta, con Yáryez que se construyeron las primeras cuadras de pavimento. Las mismas rodeaban la plaza y las cuatro diagonales y fueron financiadas con un crédito solicitado al Banco Hipotecario. En esta época, también el municipio ayudó al Club Unión Agrarios a trasladarse desde la plaza central hasta su propio predio, donde hoy se encuentra establecido. Eran épocas en las que había pocas herramientas, solo se contaba con un tractor, una desmalezadora y un pequeño tanque.
El local comenzó a funcionar en un salón de la familia Peralta en calle Misiones y Diagonal Comercio, hasta que se trasladó a la casona donde funcionaba la cooperativa eléctrica sobre calle 9 de Julio y Colón.
Durante el año que gobernó Yaryez, comenzó con la organización institucional. No había más de 7 personas contando el presidente y el secretario de la junta. En abril de 1976 el gobierno militar envió miembros de la fuerza a destituir al mandatario local.
Con la llegada de la democracia, Gaspar Carlino se postula como candidato y obtiene la intendencia por voto de sus vecinos.
En su carrera laboral, destaca las buenas administraciones que ha sido lo que ha permitido el desarrollo de muchas obras, el pago a término de salarios y a proveedores y la inexistencia de endeudamientos. Ya en su función dentro del área contable, siempre sugirió no tomar deudas ni créditos innecesarios que pudiesen afectar la administración municipal.
Sobre el crecimiento de la institución denota el gran cambio. Pasó de usar solo una calculadora y una máquina de escribir a tener informatizados sus propios sistemas y diversas áreas de trabajo para agilizar los trámites y servicios al vecino.
En cuanto a las épocas de crisis económicas, el ex empleado municipal afirma que desde la entidad no hubo muchos inconvenientes en lo contable. Incluso en los tiempos de las cuasi monedas ciertos trámites se complicaban pero los empleados siempre cobraron a término porque había prudencia en la administración.
Como consejo a las próximas administraciones sugiere que se continúe con el orden y que quien continúe al frente de la gobernación local, tenga la predisposición para escuchar a unos y otros sin importar la ideología política que tenga. Recomienda no olvidar que la función principal de todo gobernante es estar cerca del ciudadano y brindarle en lo posible, las soluciones necesarias para el bienestar.
Esta es una nueva etapa para Jorge Cerutti. Según sus palabras “este será un tiempo desconocido. He postergado cosas personales y trataré de realizar las que pueda. No hay nada por inventar, si para ver, disfrutar y seguir trabajando pero más relajado”.
