El Día de la Educación Ambiental tiene su origen en el año 1972, cuando se celebró la Conferencia Internacional de las Naciones Unidas sobre el Medio Humano, en la ciudad de Estocolmo, Suecia. Esto marcó un punto de inflexión en materia ambiental, porque allí se expuso la problemática y la educación ambiental como cuestión a ser atendida en las agendas nacionales. Esta Conferencia dio lugar a la Carta de Belgrado, que fue publicada tres años después; allí se exponen los lineamientos principales de la educación ambiental, con sus objetivos y principios, y se establecieron metas ambientales.
A través de la educación ambiental se busca comprender la naturaleza compleja del medio ambiente y adquirir los conocimientos, valores y habilidades prácticas necesarias para participar responsable y eficazmente en la prevención y solución de los problemas ambientales, como también en la gestión de la calidad del medio ambiente.
En este sentido, el programa Cerrito Más Verde, implementado por el municipio local, tiene como uno de los ejes centrales la educación ambiental, ya que la considera muy importante para generar conciencia y compromisos de acción en la población en general y en los niños y jóvenes en particular.
La incorporación de la educación ambiental en Cerrito se plantea como un desafío de época: preparar a la comunidad en una nueva relación con el ambiente, centrada en los valores, con el objetivo de promover la cultura de participación para su involucramiento en la solución de los problemas ambientales.
De esta manera, la educación ambiental se convierte en una herramienta fundamental para el cambio de hábitos relacionados con la gestión responsable de los residuos, el cuidado del agua, la energía y el arbolado urbano, y lograr así una comunidad ecológica y socialmente responsable.