Cada 2 de mayo se conmemora el Día Internacional contra el Bullying, con el propósito de concientizar sobre el riesgo que representa el acoso escolar para niños y adolescentes en todo el mundo.
La fecha busca promover medidas para combatir este flagelo, que constituye un peligro grave para la población infantil y juvenil.
Según datos de la Unicef, la mitad de los adolescentes del mundo sufre violencia en las escuelas. Alrededor de 150 millones de estudiantes de entre 10 y 17 años confesaron sufrir de violencia entre compañeros en la escuela y en sus inmediaciones.
El bullying, o acoso escolar, se manifiesta a través de comportamientos verbales o físicos repetitivos que causan daño temporal o permanente en la víctima.
Entre sus consecuencias, se encuentran el bajo rendimiento escolar, síntomas de depresión, baja autoestima e incluso, el deseo de atentar contra la propia vida.
Acabar con el bullying es una tarea que nos compete a todos